Para muchos residentes urbanos, los transbordadores son el centro de la vida cotidiana, ya que ofrecen una forma rápida y cómoda de desplazarse por la ciudad evitando las calles congestionadas por el tráfico. Pero aunque los transbordadores forman parte de muchos sistemas de transporte urbano, con demasiada frecuencia siguen funcionando con gasóleo marino altamente contaminante. Para ponerlo en perspectiva, cada año los transbordadores transportan casi tantos pasajeros como el sector aéreo, y reducir las emisiones de carbono en general se ha convertido en una prioridad, tanto porque los residentes exigen ciudades más ecológicas como porque las normativas y leyes así lo exigen.
Aquí es donde la empresa noruega Zeabuz, junto con su socio Torghatten, tiene una solución. Su nuevo transbordador, el MF Estelle, se botó en Estocolmo en la primavera de 2023 y es el primer transbordador eléctrico autónomo del mundo, construido con la sostenibilidad como eje central y propulsado por 5G e IoT.
"Lo que hace diferente a Zeabuz es que somos totalmente eléctricos, por lo que tenemos cero emisiones", dice Carl Petersson, Ingeniero de Autonomía de Zeabuz. "Estamos intentando crear una red de pequeños transbordadores eléctricos que sean autónomos y que puedan recorrer distancias cortas en las ciudades, con salidas muy frecuentes. Esto creará un sistema de movilidad rápido, cómodo y ecológico para dar servicio a los habitantes de las ciudades."