En una era en la que la transformación digital y los dispositivos conectados son omnipresentes, el IoT ha surgido como una fuerza transformadora que reconfigura los sectores y redefine las operaciones empresariales. Según las estadísticas de Statista, aproximadamente el 57 % de las organizaciones norteamericanas y europeas integran actualmente la tecnología IoT en sus procesos empresariales. Empresas de diversos sectores están adoptando e invirtiendo en soluciones IoT para aumentar la eficiencia, la productividad y la seguridad.
Con el rápido crecimiento viene el deseo de expandirse, y limitar su negocio a un solo continente puede obstaculizar su potencial. Si quieres expandirte de Norteamérica a la Unión Europea (UE) o viceversa, aquí tienes algunas consideraciones clave para una expansión internacional exitosa.
Elegir la plataforma de gestión de la conectividad IoT adecuada
Si lleva tiempo en el sector del IoT, sabrá que un componente crucial es su plataforma de gestión de la conectividad (CMP). Cisco IoT Control Center es líder en este campo, ya que ofrece funciones sólidas para la conectividad de dispositivos, la gestión de datos y la seguridad.
La asociación de Tele2 IoT con Cisco comenzó en los primeros días, y esta asociación nos ha permitido ofrecer las prestaciones que nuestros clientes necesitan. Una de las mayores ventajas de la plataforma es su capacidad para gestionar la conectividad a escala mundial. Expandirse a través de continentes implica navegar por diversos protocolos de red, estándares variables y diferentes entornos de telecomunicaciones, lo que puede suponer todo un reto. Contar con la CMP adecuada puede aliviar muchos quebraderos de cabeza.
Garantizar la seguridad y la escalabilidad
Cuando se planifica el despliegue empresarial en varios continentes, es esencial tener en cuenta los distintos marcos normativos y requisitos de cumplimiento, especialmente en áreas como la privacidad y la seguridad de los datos. Cisco IoT Control Center está diseñado para cumplir las normativas internacionales. Esto es crucial para la expansión internacional, ya que ayuda a las empresas a navegar por las complejidades de cumplimiento, asegurando que las operaciones de IoT se alinean con las regulaciones regionales como GDPR (Reglamento General de Protección de Datos) en Europa.